Las nuevas y las antiguas formas de ensillar de la cultura criolla
En sus orígenes. el criollo usaba para montar el lomillo porteño. Según ese gran artesano que fue Luis Alberto Flores, esta pieza está constituida por dos bastos de forma oval, paralelos, cuyos extremos se unen mediante sendos arcos de madera (arzones o fustes), todo retobado con cuero curtido. A uno y a otro basto se hallan aseguradas las faldas, rectángulos de suela de gran dimensión.